¿Te has preguntado de dónde obtenemos la energía para hacer ejercicio y practicar deportes? ¿Crees que tenemos reservas de energía en nuestro cuerpo?
Bien, para explicar y responder todo esto, tenemos que saber qué es el glucógeno, la fuente de energía derivada de la glucosa que nuestro organismo almacena en el cuerpo a modo de reserva energética.
¿Cómo se obtiene el glucógeno?
El cuerpo necesita energía, la que es mayormente obtenida a través de los carbohidratos. A su vez, la energía de los carbohidratos es transformada en glucosa, siendo esta última usada como fuente de energía por el organismo.
¿Qué sucede con la glucosa que no es usada por el cuerpo? Simplemente, se guarda como reserva de energía para ser usada posteriormente, cuando el cuerpo así lo necesite. Pero para que esto sea posible, antes la glucosa debe ser transformada en glucógeno. Este proceso de transformación de glucosa en glucógeno se llama glucogénesis y se realiza a través del hígado y los músculos.
¿Dónde se reserva el glucógeno?
El hígado y los músculos, además de realizar la síntesis de la glucosa en glucógeno, guardan las reservas de glucógeno producidas.
Dado que la actividad física requiere de energía, está claro que los músculos tienen mayor capacidad de reserva de glucógeno, por lo que en ellos se guarda aproximadamente 2/3 del total corporal. El tercio de glucógeno restante se guarda en el hígado.
INGRAM PUBLISHING/THINKSTOCK
Al hacer ejercicio, los músculos deben usar sus reservas de glucógeno para convertirlas en glucosa (gluconeogénesis). Pero esta glucosa sólo es utilizada por los músculos. Así, el hígado es el responsable de realizar la gluconeogénesis para proveer a todas las células del organismo de la glucosa necesaria para que realicen su trabajo. Ello debería darte una pauta de lo importante que es cuidar del hígado.
¿Qué pasa con el glucógeno que no es almacenado?
Claro que el organismo reserva glucógeno hasta cierto límite. Ese excedente de glucosa que no puede ser transformado en glucógeno sufre una transformación molecular y se convierte en grasa.
Por otro lado, cuando el cuerpo ya no tiene reservas de glucógeno disponibles, el organismo necesita obtener energía y para ello debe quemar grasas. Esta es una de las razones por la cual es imprescindible realizar ejercicio para quemar grasas y bajar de peso.
Eduardo Hugalde
No hay comentarios:
Publicar un comentario