Las vacaciones han culminado para los peques de la familia quienes
suelen adentrarse en largas jornadas fuera de la casa. Por ello, lo más
habitual es llevar la comida para comer fuera como si estuviéramos en
casa.
Un tupper nutritivo y completo
Claro está que comer de tupper puede ser muy sano, pero también puede
no ofrecer los nutrientes que los niños necesitan para afrontar con
éxito su jornada de estudio, por ello, es importante que prestemos
atención a los alimentos que componen cada
tupper y así, lograr una
comida nutritiva y completa lista para llevar.
En primer lugar, es fundamental que en la comida del tupper se incluyan
todos los nutrientes de una comida completa
en cantidades adecuadas, para lo cual, podemos mirar gráficamente un
tupper y pensar que gran parte de ésta debe estar cubierta por alimentos
fuente de
hidratos de carbono como puede ser arroz, harinas, féculas, pasta, entre otros. Y además, frutas y vegetales.
Un cuarto del plato debe estar cubierto por
alimentos proteicos como puede ser cualquier tipo de carne, huevo y queso. Y, aunque en escasa cantidad, no deben faltar
grasas saludables
que pueden derivar del tradicional aceite de oliva o bien, de un
pescado graso, de aceitunas, aguacate, semillas o frutos secos.
El tupper suele consumirse a modo de comida principal, por ello,
también debemos considerar que éste debe ofrecer aproximadamente un
30% de las calorías del día y debe proveer la energía suficiente para superar las actividades diarias.
Por supuesto, al tupper no le debe faltar
variedad,
pues caer en la monotonía de las ensaladas o los bocadillos no
beneficiará en nada la dieta de los más pequeños. Entonces, es
fundamental variar los ingredientes y combinarlos de manera tal que no
falten hidratos, proteínas, grasas y micronutrientes importantes para la
salud del organismo.
Cómo lograr un tupper seguro
Para que el tupper además de nutritivo sea seguro, conviene siempre supervisar la calidad del recipiente,
prefiriendo envases de vidrio y no de plástico que suelen contener bisfenol A.
Si empleamos un recipiente de plástico, es importante verificar que éste sea
apto para microoondas y para el congelador, pues un uso incorrecto puede llevar al desprendimiento de partículas del envase que se trasladan a la comida.
Asimismo, conviene cocinar los alimentos que llevaremos en el tupper y
dejar enfriar antes de tapar y refrigerar para trasladar el día siguiente.
Los
aderezos y salsas siempre conviene evitarlos o
llevarnos en un recipiente térmico por separado y refrigerar
correctamente antes de aplicar al platillo.
Siempre es importante para que el tupper sea seguro
verificar si podemos calentar la comida que llevamos en el cole, si disponemos de refrigerador o no, y dónde vamos a conservarlo hasta su consumo.
En función de estos datos, debemos elaborar nuestro tupper para consumirlo en perfectas condiciones fuera de casa.
Ideas para un tupper saludable
Para
lograr un tupper saludable para llevar al cole,
debemos pensar en los alimentos que apetecen a los niños y no siempre
es necesario cocinar un plato diferente, sino que podemos recrear
preparaciones que elaboramos el día anterior, o usar ingredientes
comunes para no cocinar muchas veces diferentes alimentos.
Por ejemplo, si hoy cenamos pescado con ensalada, al día siguiente
podemos elaborar una tarta de pescado, mientras que si hoy elaboré
ensalada de arroz, puedo guardar arroz para al día siguiente preparar un
salteado, hamburguesas, pastel o guisado con el mismo alimento.
Además, podemos
mandar sopas, gazpachos o cremas en frascos de vidrios con tapa como primer plato de nuestro tupper y en la fiambrera, armar
divertidas preparaciones colmadas de diversos
colores que incentiven el consumo por parte de los más pequeños.
Podemos elaborar tartas de vegetales con pollo o atún, ensalada
completas con arroz o legumbres como base, bocadillos con carnes magras y
vegetales, pastas con salsas varias en las cuales se incluyan vegetales
y algo de carne, hamburguesas acompañadas de arroz y vegetales,
salteados, budines y demás alternativas.
Como
postre siempre podemos enviar una
fruta fresca o un lácteo en forma alternada para completar con buenos nutrientes la comida y por último, no olvidemos que siempre es recomendable
enviar suficiente líquido a los peques para incentivar una buena hidratación que contribuya a su rendimiento mental y físico.
Con estos consejos podrás
lograr un tupper saludable, nutritivo y seguro para llevar al cole sin perder de vista la salud de los más pequeños.