La condromalacia o condropatía rotuliana
es uno de los problemas que más afectan a las rodillas de los
ciclistas. Es probablemente el problema de rodilla más frecuente, ya que
se trata de una patología relacionada con la repetición de un gesto de
forma cíclica que genera un desgaste de la zona cartilaginosa de la
parte posterior de la rótula al rozar con el cóndilo femoral (el final
del fémur). La rótula es ese pequeño hueso con forma triangular situado
justo encima de la rodilla. En su parte de arriba se inserta el músculo
recto femoral (una de las cuatro partes del cuádriceps, el músculo del
muslo). Y en su parte de abajo se une a la tibia mediante el ligamento
rotuliano. Las causas de esta degeneración o desgaste del cartílago
pueden ser muy variadas.
Los síntomas
de la condropatía rotuliana más frecuentes, además del dolor en la
parte anterior de la rodilla, son: dolor al bajar cuestas o escaleras
así como sensación de rigidez y dificultad para extender la rodilla
después de pasar un buen rato con la rodilla flexionada (un viaje en
coche o una película en el cine).
Lo más
aconsejable es que mediante resonancia magnética, un traumatólogo
determine el grado de la condropatía, ya que puede estar más avanzada o
menos. Y es importante que el traumatólogo tenga cierta experiencia con
ciclistas o al menos deportistas, ya que si no, su primera recomendación
puede ser simplemente decirte que dejes de montar en bici.
Si la condromalacia no está muy avanzada, existen una serie de tratamientos o métodos para reducir este roce y por lo tanto frenar el desgaste y eliminar las molestias:
- Subir el sillín.
Al hacer esto, flexionaremos menos la rodilla y por lo tanto pondremos
menos presión sobre la rótula. Súbelo tanto como puedas sin que tus
caderas lleguen a "bailar" en cada pedalada.
- Subir la cadencia: es
otra forma de reducir la carga sobre la rótula. Para ello, hay que
acostumbrarse a cambiar justo antes de empezar las subidas.
- Comprobar que no se lleva el sillín muy adelantado, ya que esto también aumenta la flexión de la rodilla.
- Usar pedales con pocos grados de movimiento
contribuye a reducir las desviaciones laterales de la rodilla mientras
pedaleamos, que pueden estar aumentando la presión de los cóndilos
femorales sobre la rotula.
- Mediante un análisis biomecánico de la pedalada, podremos mejorar el apoyo del pie sobre el pedal, haciendo las modificaciones pertinentes que contribuyan a reducir la presión sobre la rótula.
- Es posible que aumentando la separación entre la biela y el pedal
mejoremos, ya que una posible causa puede ser que tengamos una
separación de caderas más grande de lo normal. Esto generaría que la
tibia no estuviera alineada con el fémur y por lo tanto sería otro foco
de presión añadida sobre la rótula.
- En la vida cotidiana se debe evitar pasar mucho tiempo con la rodilla flexionada.
Si se trabaja sentado es recomendable tratar de levantarse de vez en
cuando y buscar posiciones en las que las rodillas estén estiradas.
EJERCICIOS
Realizar
una serie de ejercicios de fortalecimiento del cuádriceps ayudará a
sujetar mejor la rótula y reducir el desgaste del cartílago. Estos
ejercicios son los siguientes:
-De pie, con
piernas extendidas, simplemente contraer fuerte los cuádriceps como
empujando hacia el suelo y mantener la contracción durante 10 segundos.
Descansa otros 10 segundos y vuelve a contraer. Haz 10 repeticiones.
-Apoyando
la espalda en la pared, flexionar las rodillas unos 45 grados, sujetar
una pelota entre las rodillas. 8 repeticiones de 20 segundos descansando
20 segundos entre repeticiones.
-Sentado en una
silla, estirar una pierna y mantenerla extendida en la horizontal. Al
quinto día, ponte algo de peso del tobillo. 8 repeticiones de 20
segundos descansando 20 segundos entre repeticiones.
-En
la máquina de extensión de cuádriceps, hacer solo los últimos 10 grados
del movimiento y mantener la contracción muscular durante 5 segundos
con la rodilla extendida.
-Sentado en el
suelo, con la espalda apoyada contra la pared y las piernas extendidas.
Colocar una toalla enrollada debajo de las rodillas. Contraer el
cuádriceps, estirar la rodilla y levantar el tobillo del suelo. Empezar
con 15 repeticiones e ir aumentando.
-Estiramientos
de isquiotibiales (sentado, pierna doblada con la rodilla hacia fuera,
llevar las manos a los pies de la pierna estirada) y de cuádriceps (de
pie, doblar la pierna cogiendo el tobillo con la mano).
...Y
el uso de la propia mountain bike ya que también contribuye a
fortalecer el cuádriceps y por lo tanto a sujetar mejor la rótula y así
evitar el roce con el fémur.
No hay comentarios:
Publicar un comentario