Cuesta mucho tomar la decisión de apuntarte de un gimnasio,
así que ahora que ya lo has hecho, aprovecha el tiempo el máximo
posible. Vamos a ver 7 errores demasiado comunes que hace que tu tiempo
en el gimnasio pueda ser tiempo perdido.
Demasiada socialización:
En el gimnasio puedes conocer mucha gente (cosa que está genial), pero cuando estás entre pesas
debes asegurarte de que esos compañeros van en tu misma dirección.
Esto quiere decir que si decides entrenar con alguien, debes ENTRENAR
con esa persona. De nada sirve si haces tu serie y vas a la otra punta
del gimnasio para descansar mientras charlas.
Ir demasiado despacio:
Ir al gimnasio no quiere decir acabar exhausto. Pero si durante tu trabajo en la cinta o en la bici
te pones a leer una revista o un libro, estarás perdiendo tu tiempo. Aumenta tu intensidad haciendo intervalos para aumentar tu potencial de entrenamiento y tu quema de calorías.
No tener un plan:
Si te estás yendo al gimnasio pero no estás seguro/a de lo que tienes
que hacer, intentar copiar a los demás usuarios será un gran pérdida de
tiempo. Antes de ir al gimnasio
párate a pensar cómo vas a trabajar ese día. Cuando llegues sabrás perfectamente lo que te toca y aprovecharás mucho más tu tiempo allí.
Demasiados descansos:
Mantener el pulso elevado es la clave para el éxito de tu entrenamiento.
De modo que si en tu sesión de hoy no dejas de ir a la fuente o a la
tele para ver las noticias…. es hora de acortar ese descanso y seguir
manos a la obra. Es bueno descansar entre series y ejercicios, pero
recuerda que el pulso debe mantenerse por encima del 60% al menos.
Demasiado tiempo en el vestuario:
Si no estás concentrado/a en tu entrenamiento, tu visita al vestuario
puede pasar a ser de 20 minutos ya sea buscando un calcetín o mirando
el móvil.
Lleva tu mochila bien organizada y tratar de ir al gimnasio en las horas donde haya menos gente.
Usas sólo las máquinas:
Usar las máquinas guiadas puede hacer que trabajes ciertos músculos,
pero si las usas con demasiada asiduidad puede convertirse en una
pérdida de tiempo.
Las máquinas son demasiado cómodas y se centran únicamente en un grupo muscular.
Intenta combinar las máquinas con ejercicios de peso libre o poleas que
incluyan movimientos globales para trabajar varios músculos a la vez.
No sabes lo que estás haciendo:
Este problema es más común de lo que parece. Te has apuntado a un gimnasio y te pones a hacer la primera máquina que ves libre.
Habla con un monitor o entrenador para que te haga una rutina acorde a tu necesidades y objetivos.
Si vas por libre es probable que repitas grupos musculares, o que por
no saber exactamente cómo es el ejercicio, vayas con cuidad haciendo que
no sirva prácticamente para nada.
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