GELES, NUTRICIÓN DURANTE COMPETICIONES Y PROBLEMAS GASTROINTESTINALES

Por la popularidad de las carreras largas, la ciencia de la nutrición deportiva y el marketing, existen hoy en día múltiples maneras de reabastecer energía para todos los gustos, sabores, colores y bolsillos, sin embargo lo que no tomamos en cuenta es cómo estos geles cumplen su función y su relación con nuestro sistema digestivo. 

 

Hay una considerable cantidad de literatura científica que reconoce a la suplementación con  geles o pastillas durante competencias que resultan en molestias gastrointestinales que afectan a los atletas durante o después de la competencia. Antes de conocer qué es lo que ocurre con los geles y suplementos durante competencia, es importante entender un poco cómo responde el sistema digestivo frente al estrés del deporte. Éste es un sistema que comprende 9 metros de músculo en forma de tubo, desde la boca hasta el ano,  que tiene órganos asociados que ayudarán a la digestión y absorción de cada alimento y líquido que pase. Abasteciéndolo y drenándolo se encuentran algunos de los principales sistemas arteriales y venosos del cuerpo, tiene un sistema nervioso integrado, además de tener respuestas dadas por el sistema nervioso integral del cuerpo. Tiene 100 diferentes péptidos con reacción hormonal activos cuya función juega papeles sumamente importantes para la salud y  mantenimiento del equilibrio de todo el cuerpo. Nuestras fuentes de energía Para mantener ejercicio de larga duración, nuestro cuerpo requiere de dos fuentes primarias de energía, carbohidratos y grasa. La grasa se utiliza únicamente mientras se mantenga niveles del 60%- 70% de la capacidad aeróbica máxima y la fuente primaria serán las reservas del cuerpo. Este es un proceso lento; por tanto, mantener un rendimiento adecuado dependerá de las reservas musculares de glucógeno (glucosa almacenada) pues tienen el potencial de vaciarse en tan solo 90 minutos más o menos dependiendo del entrenamiento y la precarga de carbohidratos. Actualmente, la manera más simple y cómoda es llevar geles o gomas deportivas con concentración de carbohidratos (glucosa, fructosa u otros). Si analizamos el sistema digestivo y su respuesta al ejercicio -por ser la vía de acceso de esos carbohidratos- hay  evidencia y criterios profesionales de que éste sistema  usualmente tolera y cumple con los requerimientos nutricionales de líquidos y electrolitos cuando hay ejercicio en intensidades que van de moderadas a fuertes.
A tomar en cuenta El vaciado gástrico y la absorción generalmente equivalen a las pérdidas de sudor. Sin embargo, el ejercicio extenuante o prolongado, bajo situación de deshidratación puede resultar en un trastorno gastrointestinal o daño en los tejidos. Se encuentra alteración el la función  a distintas intensidades. Por ejemplo, reflujo asintomático ocurre al alcanzar el 90% de VO2 máx., el vaciado gástrico se afecta exponencialmente dependiendo de volumen consumido y contenido calórico ( ej., glucosa), con mayor efecto al 80% del VO2max, alta temperatura y deshidratación; a nivel intestinal sin embargo no parece haber un efecto en la aceleración del tránsito.
El flujo sanguíneo se reduce a partir de intensidades del 70% del VO2max en un 70%, y puede empeorar el cuadro a niveles críticos si ocurre hipertermia, deshidratación, hipoxia o hipoglicemia. El estómago es capaz de  vaciar suficiente cantidad de líquidos y carbohidratos en volúmenes similares a los de la sudoración y maximizar la oxidación de estos carbohidratos para su utilización durante el ejercicio. Con ingesta apropiada de glucosa al 6%, el vaciado gástrico no se convierte en factor limitante del mantenimiento de la hidratación y aporte de carbohidratos durante el ejercicio. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la absorción y metabolismo de los carbohidratos son sumamente dependientes de cada individuo. De esta manera es más simple identificar por qué existen problemas gastrointestinales con  unos geles, gomas el  snack  que cada uno prefiera  consumir durante competencias.  La ciencia indica que el 6% de glucosa en cualquiera de esos suplementos soportan el sistema digestivo, sin embargo en la práctica ese volumen frecuentemente es mayor, alcanzando hasta los 136%, y el tipo de carbohidrato influye también. Las practicas del consumo de carbohidratos serán generalmente en función de mejorar el rendimiento y es por eso que las formulas comerciales son tan variadas y poco regularizadas que su efectividad dependerá del consumidor, su experiencia y su sistema digestivo.  Náuseas y flatulencias Hay varios estudios que demuestran que consumos de altas concentraciones de glucosa se relacionan directamente con la aparición de nausea y flatulencias, sin embargo ayudaron a un mejor rendimiento durante competencias. En otros casos, las altas concentraciones calóricas y de carbohidratos causaron altos niveles de distres (náusea, diarrea, vómito) que obligaron a los atletas a retirarse de competencia. Comparando las prácticas nutricionales de varios atletas, se ha demostrado que el consume de varios nutrientes como grasas, fibra y proteína se asocia con molestias,  pero así mismo bebidas hipertónicas pueden causar lo mismo. Lastimosamente no existe suficiente evidencia de el efecto de geles o este tipo de nutrientes en competencias de larga duración y en climas hostiles o en eventos extremos. Evidencias anecdóticas en competencias largas (IM, Aventura, UM) permiten comparar experiencias con uno u otro tipo de gel o goma de carbohidrato, con casos en el que para algunos una marca resulta en molestias gástricas, mientras la otra funcionó de manera excelente para el rendimiento, otros hablan de  la necesidad de consumir abundante agua junto con el gel , mientas otros simplemente optan por mantener su bebida hidratante mezclada con una fuente de carbohidratos.  Es decir que la respuesta  y tolerancia del sistema digestivo frente a la concentración de carbohidratos es muy personal y en todos los casos se recomienda probar el suplemento antes de competencia durante entrenamientos extenuantes. El sistema digestivo es funda mental en nuestro cuerpo y para que nos pueda suplir durante el ejercicio es importante tenerlo en cuenta y aprender cómo reacciona con una u otra cosa que tomamos o comemos. Mi recomendación al consumir geles o gomas energéticas es que las prueben con el estomago vacío, durante el entrenamiento y prueban varias marcas, siempre pensar en función a las necesidades reales, es decir consumirlas de manera espaciada como si fuera competencia cada 50-60 minutos aproximadamente una  o media dosis  y procurar mantener una hidratación adecuada a la par.
Por Dra. Gabriela Moreno