Portada

Portada

viernes, 7 de septiembre de 2012

EL ALCOHOL, UN GRAN ENEMIGO DE LA DIETA

Siempre que se inicia régimen alimenticio para perder esos kilos de más que nos sobran, se pone especial cuidado en los alimentos que se toman, reduciendo aquellos que tienen altos contenidos en grasas, hidratos de carbono y también los hipercalóricos. De la misma manera, se comienza a tomar mayor cantidad de aquellos alimentos recomendados para perder peso, por su bajo contenido en grasas y calorías, como pueden ser las verduras, legumbres, fruta…

Bebidas-alcohólicas

Se trata de cambiar la conducta alimentaria que se ha llevado hasta entonces, buscando una dieta equilibrada y variada, que aporte también todos los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. Si se es constante, los resultados comienzan a notarse en muy poco tiempo, con una reducción del peso y del índice de masa corporal. Resulta fundamental también realizar ejercicio para no perder masa muscular y mantener el cuerpo en forma.
Pero en ocasiones, hay distintos agentes externos o factores que pueden ralentizar los resultados positivos, con la consiguiente desesperación de la persona que ve como su esfuerzo no está teniendo los frutos deseados. Una de las causas más habituales que originan que no haya una conveniente pérdida de peso y grasa, a pesar de estar cumpliendo las pautas señaladas por el médico especialista en materia de alimentación y actividad física, es el consumo de alcohol.
Muchas veces no se presta atención a este factor, y hay que tener en cuenta que el alcohol aporta bastantes calorías en la gran mayoría de bebidas y, además, se quedan estancadas en nuestro organismo como grasa, con el agravante de que no aporta nutrientes al cuerpo. Por eso, si siempre es muy importante reducir, e incluso eliminar, el consumo de alcohol mientras siempre por los daños que produce en nuestro organismo, con más razón si nos encontramos realizando una dieta.
No todos los tipos de alcohol y bebidas aportan las mismas calorías, por eso es también importante conocer sus distintos tipos y su aporte calórico. En la siguiente lista se muestran las cantidades de calorías por cada 100 ml en las bebidas con alcohol más importantes. Hay que tener en cuenta que algunas de ellas pueden incluso a llegar aportar más calorías, ya que se suelen mezclar con otras bebidas.
Aguardiente: 222 calorías
Anís: 297 calorías
Coñac: 243 calorías
Cerveza: 45 calorías
Crema de menta: 372 calorías

Cava o champagne: 65 calorías
Ginebra: 244 calorías
Licor de café: 336 calorías

Licores dulces: 383 calorías
Ron: 244 calorías
Sidra: 42 calorías
Vino blanco: 85 calorías
Vino rosado: 74 calorías
Vino tinto: 65 calorías
Vino fino: 124 calorías
Vodka: 124 calorías
Whisky: 244 calorías

No hay comentarios:

Publicar un comentario