Portada

Portada

jueves, 6 de diciembre de 2012

PRESIÓN ARTERIAL

La presión arterial elevada (hipertensión arterial o HTA) no provoca síntomas precoces, pero cuanto más tiempo pase sin detectarse ( y sin tratamiento), más dañará tu corazón y tus vasos sanguíneos, lo que aumenta las posibilidades de sufrir un ataque cardíaco o un accidente cardiovascular. Correr mantiene la presión arterial a raya, porque el ejercicio ayuda a dilatar los vasos sanguíneos del cuerpo y permite que la sangre circule con más facilidad. Pese a ello, el Dr. Harrast advierte sobre el error de creer que los corredores son inmunes a la hipertensión. Alrededor de un 33% de los adultos en países desarrollados pueden tener HTA, aunque muchos no lo saben. Cada año que pasa, tu riesgo aumenta. Tus comidas favoritas también pueden tener una parte de responsabilidad, de modo que la sal, las grasas saturadas y el exceso de alcohol son los principales factores agravantes. Algunas medicinas también elevan la presión arterial. Para Joel Bowman, un corredor de Nueva York de 48 años, el estrés y sus genes fueron sus principales factores de riesgo. A principios de 2008, justo unos pocos meses después de haber completado su primer maratón, este desarrollador de páginas web comenzó un tratamiento con IECA (fármacos antidepresivos) para controlar su presión arterial. "Mi médico pensaba que la dieta y el nivel de actividad física que yo realizaba eran adecuados, por lo que la medicación era la única alternativa".
La presión arterial se debe empezar a controlar a partir de los 18 años, de forma anual. Hay que tener como objetivo en mantenerla por debajo de 120/80 mmHg. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario